4 Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas.5 Encamíname en tu verdad, y enséñame, Porque tú eres el Dios de mi salvación; En ti he esperado todo el día.(Salmo 25:4,5.)
El Salmo 25, nos presenta una petición que debemos hacerla cada día. Aunque conocía los mandamientos de Dios el autor de este salmo creía que eso no bastaba. Este hombre conocía que su vida personal, necesitaba instrucción directa y divina.Este salmo nos muestra la imperiosa necesidad de la enseñanza divina, y de la confianza que nosotros debemos poner ante Dios. Lea todo el salmo y medite hasta que tu corazón esté de la absoluta necesidad de la guía divina, y la absoluta certeza de obtenerla. De esta manera en nuestras vidas esta frase «En ti he esperado todo el día.» Será nuestra esperanza de vida. El esperar ser guiado, el esperar instrucciones, todo el día, es una parte fundamental del creyente en esperar en Dios.Dios está interesado en usted que desea tanto tener su vida, en todas sus etapas, bajo su voluntad y su amor, él sabe de sobra que somos incapaces de hacer lo que es santo y celestial, mientras el no obre en nosotros, a partir de este momento sus preceptos pasan a ser promesas, en cuanto a lo que tenemos que hacer, por mi parte yo camino seguro de que tengo su guía en todo momento. Sobre todo en dificultades en tiempos de incertidumbre, en fin en mi vida diaria, sé que puedo contar con su instrucción para seguir su camino, y mostrarnos su senda.Cuando esperamos en Dios esto demuestra un espíritu de intimidad y humildad, de obediencia, de esperanza y confianza, de una amistad más íntima y de la más profunda reverencia por nuestro Creador. Leer más en: https://mvmspanish.wordpress.com/2015/01/26/senor-hazme-conocer-tus-caminos-salmo-254-5/ Una cosa es esperar esperar en Dios y otra esperar instrucciones,. «En ti, oh Dios, he esperado todo el día.» cuando esté en su tiempo de oración pida instrucciones, es necesario ser conscientes de nuestra ignorancia respecto a lo que es su camino, y la necesidad de que luz alumbrando el camino, así que debemos esperar quietamente ante Dios en oración. La biblia nos es enseña a orar sin cesar y poder exclamar «Oh, Jehová, en ti he esperado todo el día.» esta entrega en nuestra oración, debe ser seguida por la costumbre de esperar en El «todo el día». El conocimiento y la fe verdadera en Dios es nuestra fuente de sabiduría, por medio del estudio concienzudo de su palabra, siempre dispuesta y deseosa de ser para nosotros todo lo que podamos necesitar. Dios espera de nosotros que le busquemos que pidamos su dirección, desde este momento comience a hacer todas las actividades de su vida esperando en la dirección de Dios.